martes, 24 de febrero de 2015

Poemas de Pura López Cortés

Nana del olivo
                    De noche, bajo un olivo,
                    envuelto en tomillo y jara,
                    embobadito, mi niño,
                    mira la luna de plata
                    y cuando la ve en el río
                    la quiere sacar del agua.
                    Se le cierran los ojillos
                    a lo lejos croan las ranas
                    y con la pipa en la boca,
                    se duerme a la noche clara.
                                          Pura López,
Gato



Qué se esté quieto este gato,

qué ha roto el tazón y el plato,

qué deje mis zapatillas

y mi bufanda amarilla.

Qué busque por los rincones

y qué coja los ratones,

qué no salte arriba y abajo

y qué deje el estropajo.

Que yo lo trato muy bien,

le doy cama, un cascabel,

leche caliente, merluza

y él saca las uñas, bufa…

Yo no sé como educar

a ese bendito animal.

                              Pura López, poesía inédita









NANA II
                         A Eva Bóver Velasco
Duerme niña en mis brazos,
no tengas miedo;
cuando venga la noche
yo te protejo.
Alumbraré lo oscuro
con mil luceros,
traeré la luna
y envolveré en luz blanca,
niña, tu cuna.
                Pura López, del libro "En la esquina del aire"  
NANA


                             A Carlos Bóver Velasco Come, niño, tu manzana
y mira la media luna
que viene por la ventana
para mecerte la cuna;
y reza tus oraciones
y dale un beso a mamá,
que viene la media luna
para enseñarte a soñar.
                  Pura López, del libro "En la esquina del aire".


CANCIÓN
A Carmen Fernández 
Ay, cuando vaya a la mar

no sé que traerte amada.

No sé si una estrella roja

o un trozo de red salada

o plumas de las gaviotas

o algas verdes o pechinas

o el pañuelo de un pirata

o un erizo sin espinas.

Ay, cuando vaya a la mar…


Pura López




GUADALQUIVIR

                     A mis padres
Guadalquivir en Cañepla
un susurro de agua limpia
que con la calor se seca.
Cazorla entre peñascales,
Guadalquivir un regato
que se despeña a raudales.
Guadalquivir, la Mezquita,
Puente de San Rafael,
Córdoba, mora y bonita.
Guadalquivir en Sevilla
es una mar de agua dulce,
una mar con dos orillas.
Y allá en Sanlúcar el río
Guadalquivir va a morir
con vocación de navío.
               Pura López del libro A la orilla del viento



2 comentarios:

  1. Gracias por incluir mis poemas, me hace doble ilusión, por un lado el que me hayáis tenido en cuenta y por otro lado el que sea el colegio dedicado a tan entrañable profesor.
    A vuestra isposición

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  2. Mi agradecimiento más sincero por haber escogido mis poemas.
    A vuestra disposición.

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